Estarían trabajando en acuerdos.
Tiempo de acuerdos cupulares, de fantasías con los resultados, de exceso de adrenalina, de compra de voluntades, de manipular con las credenciales para votar, de sacar todo el dinero en efectivo y en especie para lograr cambiarle la intención al mayor número de ciudadanos, es tiempo de frustración, es tiempo de euforia…
Para muchas acciones en los procesos electorales ya no hay tiempo. Es necesario decirlo: no es tiempo de multiplicar alcances en las acciones “de tierra” de los candidatos, no es tiempo de cambiar los mensajes, no es tiempo de pensar en el posicionamiento de cada candidato, no es tiempo de pensar que de manera mágica aparecerán los indicadores de las mediciones de campo con resultados diferentes.
Todos los mexicanos estamos en los niveles de hartazgo por la corrupción, la inseguridad, la violencia en nuestro país. Los gobernantes en turno lograron que la credibilidad en el gobierno esté en los niveles más bajos desde que existen mediciones sobre la aceptación de su trabajo.
No hay discusión en las redes sociales que parta de un origen que no sea la corrupción de los gobiernos, de los legisladores, de los jueces.
Y como le explicamos a los ciudadanos que los que hoy son candidatos, si es que ganan, no serán igual o peor de ladrones que los que hoy no queremos que ganen las elecciones. Suponemos que los ciudadanos estarán analizando los perfiles, las trayectorias, sus acciones de gobierno; suponemos que cumplirán con su palabra de combatir, de acabar con la corrupción. PERO SOLO LO SUPONEMOS.
La elección del 1 de julio estará registrando la votación de sentimientos, de percepciones, de imágenes, de actitudes… difícilmente se estará votando razones, planes, propuestas, programas, doctrinas… los propios partidos se han encargado de sacar todos estos conceptos de su propia naturaleza partidaria, se encargaron de suplir todo por el pragmatismo en una batería de negociaciones para ganar la elección. Lo demás no importa.
Ahora es tiempo de ver lo que se puede hacer si de verdad tienen a México, a los mexicanos, como su prioridad, como la causa que motiva el “deseo de servir” a los ciudadanos…
Es tiempo de comunicar el momento de un voto inteligente, es decir, de los cuatros posibles presidentes de nuestro país, solo tres están en posibilidades de ganar… pero al final solo uno puede ganar la elección, así que creer que es una buena estrategia pelear quien es el segundo lugar es bobo, inútil y por lo menos comunica que sus estrategas se fueron de vacaciones de verano hace varios días.
Si las intenciones de votos siguen como están: AMLO en primer lugar y los otros tres piensan que por sus propias estrategias van a remontar esa intención de voto, eso no va a suceder por más especulación que se tenga sobre el volumen de indecisos, voto útil, acuerdos políticos, negociaciones, etc.
Si siguen desdeñando las actuaciones de los otros dos… el resultado es previsible y entonces el grupo que maneja la estrategia de Morena tiene razón en estar en negociaciones para integrar equipos de gobierno.
Los votos controlados, votos “duros”, los votos comprometidos, comprados, chantajeados, etc. No alcanza para cambiar sus intenciones de votación para el día de la elección… en los días que quedan antes de la elección, estimados candidatos, ustedes conocen sus números, se han gastado muchos millones de pesos en las encuestas y seguramente creen en sus números. Si no quieres que gane el candidato de Morena tienes que anteponer tu generosidad y acordar un voto inteligente.
Entre Meade y Anaya está quien le puede dar la banda presidencial al otro y ganarle el proceso y si conservas la idea de, ahora sí, controlar al que gane para que no se repita el escenario de gobiernos corruptos, la solución es el voto diferenciado; para no otorgar todo el poder, sin contrapesos, sin leyes reglamentarias, sin controles.
Un presidente con mayoría en las cámaras es igual a poner las condiciones de seguir igual o peor que como estamos: sin leyes y estructuras que castiguen a los corruptos, con una presidencia toda poderosa, con qué mecanismos los ciudadanos van a controlar las acciones del ejecutivo…
FELICITACIONES A LOS PAPÁS,
DIOS LOS BENDIGA A TODOS.
Hasta la próxima PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez,
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
presidente@iapguanajuato.org, gmg@gerardomosqueda.com.mx
gerardomosqueda/ mosquedagerardo
