Opinión

EDITORIAL

Salvatierra, Gto.- Lo que para la autoridad municipal fue una nota falsa, respecto al robo de la camioneta del ex alcalde Rito Vargas Varela, solo vino a confirmar la veracidad de la información que publicó Reporte Bajío, pues aunque sí se trata de una camioneta de su propiedad, el asalto no fue a él sino a su hijo.

Y lo que un usuario de Facebook identificado como FranKo Moreno compartió y al que le pusieron el letrero rojo con mayúsculas “falso”, para tratar de quedar bien con su patrona, lo único que hizo fue reconocer la veracidad del hecho.

Y a través de un pésimamente redactado “boletín” emitido por la rimbombante “Dependencia de Comunicación Social e Informática, (Comunicación Salvatierra)”, pretende ser el único documento “verdadero” para emitir (u ocultar), la información que convenga o no.

En el caso de Reporte Bajío, las informaciones que se publican, además de contar siempre con fuentes confiables y verificadas, no tienen por qué pasar a la aprobación de la “rimbombante dependencia” porque fue un hecho consumado en la calle, de un pueblo chico con sobrados testigos.

Y en el “comunicado de la verdad” y de supuestos desmentidos, lo que comienza con la violencia del martes, la “revuelca” con notas que pretende “desaparecer” y tratar de “remachar” que son falsas las informaciones inocultables, en esta ciudad chica, pero con ciudadanos inteligentes.

Y si se pretende decir que es mentira las muertes de empresarios, como la de un restaurantero (recién casado hacía unos 3 años con una chica de Tarimoro), el que conducía una Hummer, al que a principios de diciembre le habían secuestrado también un primo y que todavía no aparece, o al propietario de un negocio con venta de acero para la construcción, precisamente a unas dos cuadras de la Presidencia, atrás de la parroquia, o a los muertos sobre el bulevar Posadas cerca de la glorieta.

Estos sin contar los muertos que se registraron en comercios ubicados a los lados de la carretera en San Pedro de Los Naranjos, desde el inicio del año, además de los que hubo en colonias como en Molino de Ávila, sumando la muerte de varios uniformados.

Estos son algunos de los datos verificables que se publicaron, sin contar con el presunto secuestro de un familiar de la presidenta, del que se pretendió ocultar sin lograrlo, debido a que Salvatierra es “un pueblo chico con infierno grande”.

Y como la “única y absoluta verdad” lo tienen “los comunicados oficiales, para que los vecinos no sean los estelares del noticiero matutino”, con el que emitieron este miércoles, trataron de soslayar los hechos violentos registrados en varias zonas del Estado.

Dice el “comunicado”, que muchas emisiones en las redes “siembran pánico y conllevan a decisiones impulsivas por parte de nuestros ciudadanos, cuya preocupación comprendemos profundamente”.

Pero al mezclar hechos del martes, en el que se insiste en que “Salvatierra, al día de hoy no hay ninguna zona declarada en riesgo por los hechos suscitados ayer en el estado”, intercala datos falsos en la red, (como balaceras o la supuesta detención del Marro) como hechos dados por este medio, que sí fueron confirmados.

Incluso medios de comunicación y prensa, considerados por esta dependencia como “no serios” se sumaron a la postura de defender la libertad de informar a través de un chat de comunicación con que cuentan en la dirección citada y de la cual, (por instrucciones de alguien) Reporte Bajío no forma parte, pues tampoco recibe boletines oficiales y su trabajo de más de 5 años, se ha tratado de entorpecer por personal del área y una directora ausente, que además de desconocer las responsabilidades del cargo que ostenta, no es oriunda de Salvatierra, ni de la región cercana pues, y por ende, desconoce totalmente la información y el trato a medios.

Cerramos el capítulo dejando claro que a pesar de “sus trabas” y su exclusión, seguiremos trabajando e informando a la sociedad de los sucesos más importantes en el municipio de Salvatierra y toda la región, con plena libertad de que no seguimos instrucciones oficiales del gobierno local, no permitiremos que coarten nuestro derecho constitucional a la información y a la libertad de prensa.