Aunque insuficiente, el aumento al salario mínimo era impostergable; en el caso de Guanajuato, este hecho debe integrarse a un proyecto que implique cambios en la política económica de la entidad, de mayor impulso a la industria y el fortalecimiento al comercio locales, para que realmente beneficie a las y los guanajuatenses.
El presidente del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Baltasar Zamudio Cortés, expresó lo anterior al hacer referencia al anuncio de aumento del salario mínimo a 80 pesos hecho por el gobierno federal.
El PRD, explicó, ha propuesto que el salario mínimo debe ser de poco más de 83 pesos. Es un avance que sea de 80 pesos, dijo, pero aún es insuficiente. Indicó su preocupación de que no se prevén medidas que eviten un espiral inflacionario.
El aumento salarial, añadió, no sólo contribuye a atenuar la pérdida de poder adquisitivo, sino que permitirá un mayor impulso a la economía a través del consumo.
En el caso de Guanajuato, explicó, la mayor parte de las y los asalariados reciben dos salarios mínimos; 160 pesos al día, abundó, no son suficientes para atender las necesidades de una familia, pero al menos aporta un poco más de recursos.
Por lo anterior, es necesario que el gobierno del estado establezca cambios en sus políticas económicas e impulsar más a las vocaciones productivas de la entidad, en especial las industrias textil y de calzado, así como al comercio y el campo.
Las inversiones externas son importantes, acotó, pero no pueden establecerse en detrimento de la economía local; deben garantizar salarios dignos, prestaciones laborales de ley y programas empresariales que permitan el desarrollo de las y los trabajadores.
En contraste con la omisión de las autoridades estatales, resaltó, empresarios japoneses han demandado un más eficiente combate a la delincuencia; la mejora en las condiciones laborales y de vida de las y los trabajadores contribuirá a una mayor seguridad pública, concluyó.
