Opinión

DOBLE O NADA

MARQUEZ MARQUEZ, NI DIOS, NI PRESIDENTE ¿GOBERNADOR?

Por: José Luis Ramírez

Estas líneas que escribo deberían titularse, Crónica de una derrota anunciada, pero esto, va más allá. Déjeme decirle algo, la lista de perdedores del Pan es más larga y pesada que la de su oposición. No es consuelo, pero servirá para que le bajen dos rayitas al triunfalismo panista.

El dinero no es la vida, pero cómo gana campañas, dirían los mercadólogos. Un evento que trascendió a las formas usuales de redirigir los recursos para beneficio electoral, sin lugar a dudas, fueron los 4 mil 700 millones pesos que pidió prestados el ciudadano Márquez para destinarlos a destacar su imagen como precandidato presidencial, que desde luego se disfrazaron como inversión, para los famosos “polígonos de la pobreza”.

Esa cantidad se duplicó, con los préstamos que a su vez hicieron los gobiernos municipales. En suma, estamos hablando de 9 mil 400 millones de pesos gastados en un entorno eminentemente electoral. Sin embargo, el primer damnificado político, fue el mismo gobernador, su aspiración presidencial se truncó por razones divinas, y ni siquiera obtuvo boleto para subir al Senado de la república. Se quedó huérfano frente al embate federal que pudo haber sido del PRI, pero que finalmente será ahora con Morena.

De cierto esa inversión descomunal, que no dio frutos sociales –y lo veremos más adelante-, en un tercer rebote le permitió hacer cálculos electorales para arropar al candidato panista a la presidencia, Ricardo Anaya. Ya encarrerado, y en mitin placero, le adelantó que su gobierno le aportaría 1 millón 400 mil votos. El cochinito, daría para votos como puerco que se respete. Lo cierto, es que solo le alcanzó para 924 mil votos panistas, que no le salvó el pellejo al joven Riky. Estuvo por debajo de su meta con cerca de medio millón de votos, y en relación al 2012 tuvo una diferencia en contra de 187 mil votos. Los votos del Prd y Mc fueron testimoniales y tan útiles como el beso de Judas.

Como usted recordará, el siempre sonriente Márquez Márquez, presionó a los gobiernos municipales para que tomaran esos créditos con la promesa –real- de duplicarlos. Celaya, lo hizo con 350 millones de pesos, que perfectamente apuntalarían la relección del repudiado y malquerido ciudadano Lemus. Lo dije el 2 de noviembre del 2016, “pavimentaron con plata el camino releccionista”, usaron 700 millones de pesos para obras pías en un año electoral, solo para Celaya. Esa cantidad equivaldría a 466 mil tarjetas, llamadas popularmente, “Knaya” de 1,500 pesos. Pero, a pesar de ese cuerno de la abundancia, en la ruta también se quedaría el ciudadano Lemus, aunque con su gozoso y poligonal diezmo de la pobreza, y un futuro incierto en manos de la dama de hierro, Elvira Paniagua.

Esta iniciativa de endeudamiento de MMM para vestir de azul todo Guanajuato, nos endeudó. El costo del triunfo de Sinhue, y de los candidatos panistas, ha sido un boquete a las finanzas públicas por 15 años. Si ponemos como referencia, la inversión en obra pública solo de los préstamos, y los programas asistencialistas –condicionados- con los que arroparon sus campañas, las cifras son de nauseas. ¿Con que calidad moral se puede decir que ganaron, si básicamente lo que hicieron fue intercambiar a precio de oro, votos para su reino de la inmoralidad?

¿Pueden decir que ganaron, cuando a más dinero usado, tuvieron menos votos? Esa disminución de votos a su favor, tuvo una razón: el hartazgo a sus gobiernos de corrupción ética y moral, como el de los hermanos Villarreal de San Miguel de Allende, de Salamanca, de Celaya, y otros más que se sostuvieron por el dineral de los préstamos y los cochinitos engordados con el diezmo consabido.

¿Con qué argumentos puede presumir el triunfo, el gobierno estatal que está por terminar, si está reprobado nacional e internacionalmente en seguridad pública y procuración de justicia? ¿Cómo pueden presumir el triunfo de un candidato que pertenece al mismo Partido político, y al mismo grupo que no ha sido capaz de evitar el baño de sangre en nuestra tierra? ¿Cómo pueden presumir que ganaron con el voto libre de la gente, si se gastaron 27 mil 375 millones de pesos solamente en seguridad pública y procuración de justicia sin conseguir que nuestros municipios y calles sean nuevamente pacíficas y seguras? ¿Realmente ganaron?

El ciudadano de las 3Ms, ha presumido el desarrollo automotriz como la joya de su Corona, pero el lugar donde se construyó Honda, la empresa que da trabajo a 5 mil personas, la desplantaron en un hoyo que se inunda recurrentemente. ¿Cómo puede presumir una ciudad industrial, que ni siquiera en la cultura rupestre y en la época de los palafitos se atreverían a construir como se hizo ahora? A lo largo de muchos años se han gastado cientos de millones de pesos para desarrollar una infraestructura que permitiera el crecimiento de ese tipo de industrias, y resulta que el sitio es inundable.

¿Cómo puede presumir un gobierno que se está yendo con la cola entre las patas, el desarrollo y la innovación tecnológica cuando ha comprometido la inversión de 16 mil 800 millones de pesos de una empresa de talla internacional como Honda, al dejar que se construyera en un sitio inundable, y además, ser omiso a tareas de prevención y planeación con motivos de las lluvias?

El ciudadano de las 3Ms, dice que no es Dios, para evadir su responsabilidad por el desastre de las inundaciones en las comunidades de la ribera del rio laja, y efectivamente no lo es. No puede hacer llover, ni evitar que llueva, pero sí puede y es su obligación, prever que cualquier fenómeno meteorológico, no ponga en riesgo la vida y el patrimonio de las personas. Para eso está la ciencia, la tecnología, y desde luego, las personas especializadas de esas tareas; para eso es el dinero, que ha malgastado  a manos llenas sin ningún resultado en seguridad pública, en combate a la inseguridad y la pobreza; para eso debió de ser usado el dinero, no en campañas electoreras con su fantasiosa intención de ser candidato a la Presidencia de la Republica, y ahora, con otra ambición tan pueril como la anterior: ser Presidente del Partido acción nacional, ese nicho de Moreno Valle y compañía, que se está resquebrajando a 60 votos menos por segundo.

Está claro que no es Dios, Márquez Márquez, sus anhelos son tan mezquinos y terrestres como los del dinosaurio que gobernó el país estos últimos seis años. Nada extraordinario, ni divino. Lo que si ofende es que los guanajuatenses hemos sido promotores involuntarios de sus sueños virreinales.

Sé que estás líneas atrás, no son suficientes para explorar una pregunta como la siguiente: ¿Ganó el ciudadano de las 3Ms, y sus candidatos en Guanajuato? En primer abono, a mí me parece que el Pan de muertos, se está cocinando por última vez en Guanajuato.

Revolcadero. Elvira Paniagua en Celaya, con un camino de plata, tuvo menos votos que el ciudadano Lemus hace tres años. Javier ganó tres regidores con mas de 36 mil votantes que confiaron en que no se rajaría; y claro, a Morena le hizo el milagro el señor López, le aportó miles de electores para obtener 3 regidores; Monserrat, alcanzó a salvar en el derrumbe, a un regidor; el Verde, hizo magia, obtuvo un regidor, que de seguro no aguantará ni el primer cañonazo de salva. Crece la desconfianza porque en mas del 70% de las casillas hubo mano negra. Si la elección es sucia, el ganador es…?