Cortazar, Gto.- La Hermana Minerva Delgado Herrera, Servidora Franciscana de Cristo Pobre, denunció un ataque por supuesto trabajador de Fiscalización, pero también fue acusada de usurpación, robo de casa habitación y de menores.
La religiosa dijo que el supuesto empleado de Fiscalización del que no precisó nombre, la golpeó y le causó lesiones en la muñeca de la mano derecha, según dijo en improvisada rueda de prensa en el jardín principal.
La Hermana Delgado Herrera, dijo que vivió en Chihuahua, regresó a Cortazar hace dos meses, y sin actividades indicó que carece de sustento para atender la lesión, y demandó apoyo de la autoridad.
Dijo que la lesión se la hizo presuntamente el empleado municipal, luego de que presentó una queja en la Presidencia Municipal, porque la acusaban de usurpación de funciones y robo en casa-habitación y rapto.
En la Presidencia dijo, le pidieron que señalara al empleado de Fiscalización que la acusó y acosó, y que se lo volvió encontrar en la calle, ella lo jaló de la manga de la camisa y le pidió ir ante la autoridad y en el forcejeo la lastimó, indicó.
Pero también denunció que presuntamente hace 12 años, un particular donó un terreno para la construcción de un asilo de ancianos, pues la hermana se dedicaba a ayudar a un grupo de 100 personas de la tercera edad.
Aunque no dijo el nombre del asilo, ni en qué lugar los atendía, se acercó a la licenciada Blanca Ojeda, -que sería Notaria-, para hacer el protocolo y crear una Asociación Civil y hacer la escritura a su nombre, pero quedó fuera del proyecto.
Y denunció al mismo tiempo, que la Licenciada supuestamente inició la construcción de un albergue, e indicó, que "solicita dinero y ayuda en especie mensualmente, sin que hasta el momento se tenga ningún avance del proyecto".
