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CELAYA, GTO; Vecinos del fraccionamiento Campo Azul, acudieron a la presidencia municipal para manifestar su inconformidad al asegurar que se sienten abandonados por la autoridad en materia de seguridad y servicios públicos.
Miguel Alonso Sandoval Gallardo, vocal del comité de colonos, encargado de la seguridad vecinal, comentó que han ingresado diversos oficios ante las diferentes dependencias municipales, mismos que aseveró, han sido ignorados.
“Lo que necesitamos es que ya la autoridad nos escuche y pongan atención a nuestras demandas; semanalmente han de robar unas cuatro o cinco veces y robo a casa habitación, esto está escalando y lo que tratamos de hacer es que tengamos rondines de vigilancia, tenemos una caseta, que también ya fue vandalizada por completo, en cuestiones de seis meses, se llevaron hasta los cables, el medidor, las puertas, las ventanas, todo”.
La falta de agua potable, fallas y vandalismo en el alumbrado público y la ausencia total de seguridad pública en la zona, han provocado que haya descontrol en el lugar que habitan por lo menos mil familias, que se han visto afectadas por fiestas clandestinas, asaltos y robos a casa habitación.
Señaló que, incluso dentro del mismo fraccionamiento, se tienen identificadas viviendas que son habitadas por posibles delincuentes, a quienes, al calor del enojo, los vecinos han estado a punto de sacar de sus casas para lincharlos y es por eso han preferido recurrir a la autoridad para que la situación pueda ser controlada.
“Nos sentimos desamparados, por eso venimos apelando a la autoridad a que tomen cartas en el asunto y empecemos a trabajar para que evitemos estos brotes porque ya cuando la gente se enardece, es difícil controlarlos”.
El escenario, comentó Sandoval Gallardo, se ha agravado debido a que tampoco la empresa fraccionadora ha respondido ante sus gestiones por municipalizar el asentamiento.
El vocero de los colonos amagó con una manifestación con la totalidad de los habitantes de la zona, de no ver resueltas sus peticiones a corto plazo.
Aunque la comitiva de vecinos buscaba reunirse con la presidenta municipal, Elvira Paniagua Rodríguez, a quien siguieron al Salón de Cabildo en donde la munícipe se encontraba en un evento público, los quejosos fueron interceptados primero por la asistente de la primera edil, quien los “entretuvo” mientras el Secretario del Ayuntamiento, Roberto Hugo Arias, pudo salir del evento para llevarlos a su oficina y la alcaldesa pudiera salir sin ser interceptada.
