Celaya, Gto.- A media cuadra de la Presidencia Municipal están cuatro árboles secos que fueron jacarandas, y que ahora, no solamente son una mala imagen, sino que representan riesgo para los ciudadanos, por las ramas que pueden caer a las personas que visiten el jardín San Agustín.
Ahora los que están en mayor riesgo son los trabajadores que ofrecen sus servicios para lustrar calzado, pues permanecen en sus puestos todo el día.
Este jardín frente al templo de San Agustín, era uno de los favoritos para personas de la tercera edad que se pasaban las horas a la sombra de los árboles, con pláticas sobre diferentes tópicos e intercambio de experiencias, recuerdos de sus años mozos y al ver pasar a la gente.
Pero por ahora ya no lo hacen más, porque no hay sombra, como tampoco lo hacen los clientes de los antojitos como las tradicionales tostadas de encurtidos de la esquina con Democracia frente al portal de Peregrinos.
Incluso, muchos usuarios, jóvenes estudiantes o no, ya no buscan sentarse entorno de las jardineras en las que hay algunas flores ornamentales, para conectarse a la red gratuita del internet, porque el sol a plomo no se los permite.
Hace tres años las jacarandas con todo su esplendor y verdor, además de ofrecer una vista hermosa, daban buena sombra, pero sin saber las razones, las autoridades dejaron al descuido la reposición de los árboles y ahora solo se aparenta desolación.
Muchas personas se quejan del descuido y los robos del metal de los barandales en la alameda, y del mal uso que se le da a los empastados porque se usan para el adiestramiento canino, pero también se señala que se requiere la reposición de los árboles cuando terminaron su vida útil.
Algunas personas opinan que como el jardín esta en el centro de la ciudad, los encargados del mantenimiento no lo ven como prioridad, y prefieren trabajar en otros rumbos y aunque es bueno, deben considerar todas las áreas verdes para los turistas y de beneficio para los locales.